Santiago. Los puntos habilitados por las autoridades de Salud Pública en Santiago para realizar pruebas para detección del COVID-19, comienzan a ser abarrotados con la formación de largas filas, debido a que también se suman personas que llegan de otros pueblos.
Las autoridades sanitarias en la provincia estiman que en los últimos días se están haciendo aproximadamente tres mil pruebas PCR cada 24 horas en los espacios que funcionan en el Gran Teatro del Cibao, frente a Salud Pública, en la avenida Hermanas Mirabal, en el club de Villa Olga, en el sector La Otra Banda, en el centro regional de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
Debido a las dificultades para hacerse las pruebas en otros pueblos, al punto fijo que opera en carpas en el Teatro Cibao han llegado personas desde Santo Domingo, Moca, Constanza, La Vega y hasta de zonas tan apartadas como el Pico Duarte, en la cordillera Central. También se hacen pruebas en los centros policlínicos de los municipios que integran la provincia y barriadas de Santiago y los principales centros privados.
A la larga espera para logar la prueba se suma la queja por la tardanza en la entrega de resultados, lo que dependiendo del lugar, puede durar de tres y hasta diez días laborales. Las quejas de algunos familiares de personas afectadas por el coronavirus, es que muchos superan el virus a la espera del resultado por los problemas que enfrentan los laboratorios de Santo Domingo.
Narciso Colón llegó a tempranas horas de la mañana para conseguir un turno para hacerse la prueba, debido a que de las 50 que diariamente realizan en el club Villa Olga, muchos quedan fuera. Una realidad que viven otros ciudadanos debido a la gran demanda.
Mientras en el espacio habilitado en el Gran Teatro del Cibao se hacen entre 280 y 400 por día y cien frente al local de Salud Pública. Algunos llegan sin siquiera sentir síntomas, pero dicen que lo hacen por precaución, ya que hicieron contacto con personas que dieron positivo al COVID-19.
MIGUEL PONCE
